viernes, 10 de junio de 2011
Flash del terror
Flash del terror
Piura, a PASo lento
“No queremos pasar por encima de la autoridad”, así manifestó a un medio local el representante del consorcio Piura, contratista encargada de ejecutar el cambio de redes de agua y alcantarillado en Piura y Castilla como parte del Lote 3B del Proyecto de Aguas Superficiales (PAS).
Pero hace tiempo esta empresa, desde la gestión anterior, ha pasado por la cabeza de las autoridades y peor aún de los sufridos vecinos y empresarios, sobre todote los que viven en Piura Cuadrada, zona eminentemente comercial. Y es que dicho consorcio no ha sabido informar bien a los ciudadanos sobre los trabajos en los diferentes frentes ni ha respetado los cronogramas que ha presentado a la Comuna.
Lo que no se comprende es por qué la contratista no culmina un tramo con la debida reposición del pavimento y ya está abriendo una nueva zanja que agudiza el tráfico vehicular. Por desgracia a un diseño colonial de pequeñas urbes con calles y veredas estrechas, como el de nuestra ciudad, el problema es mayúsculo.
Hace unos días la municipalidad provincial de Piura se puso fuerte
al empezar aplicar una ordenanza al consorcio Piura para que deje de abrir más vías sin antes culmine otras. Atrás quedó la insensata propuesta de cerrar el centro por unos días. Luego vino la práctica amenaza de dicha empresa de que tiene que seguir trabajando para cumplir con el contrato que suscribió con el Estado.
En efecto, los trabajos del PAS deberían terminar el próximo 9 de septiembre, cumpliéndose así los 600 días calendario, sin embargo ya se han advertido de retrasos que podrían prorrogar esta fecha. Un fenómeno lluvioso para fines de este año es incierto, pero dados los continuos cambios climáticos que experimenta la región es mejor anticiparnos y -para el bien de Piura- librarnos de las zanjas.
La contratista ha informado que la obra tiene un avance del 80%. De eso somos testigos con las impresentables calles que nos están dejando: todas parchadas y que no muestran una buena cara al turismo.
Los vecinos exigen celeridad al consorcio Piura, pero un avance a ese ritmo les trae a la vez muchos malestares. En lo que no se preocupan es cómo mitigar los efectos de estos trabajos cuando se ejecutan en horarios de gran concurrencia de público. Una manera de preocuparse es informar antes de abrir una calle, disponer de puentes peatonales y una adecuada señalización del tránsito.
Los piuranos esperan que el sacrificio, el de soportar todo este calvario de calles cerradas, zanjas, ruido y más, valga la pena. Se estima que la obra mejorará el servicio: no más colapsos del desagüe nos dicen. No obstante, el Colegio de Ingenieros ya se ha pronunciado con algunas observaciones al lote 3B del PAS, las cuales deberán ser subsanadas si se quiere dar tranquilidad a los vecinos con una garantía de 20 a 30 años.
miércoles, 8 de junio de 2011
Acabemos esta polarización
Más de uno creía que pasada las elecciones se terminaba esa tenaz polarización que ha marcado una reñida segunda vuelta electoral. Ilusos hemos sido. Lo cierto es que a muchos les cuesta aún reconocer que ya tenemos un presidente electo y más bien ridiculizan a más del 51% de peruanos que votó a favor del nacionalista Ollanta Humala.
Creo también que si ganaba Keiko Fujimori hay quienes se estarían ocupando de buscar alguna argucia para argumentar un supuesto fraude. A diferencia de otras elecciones, esta vez el descontento es mayor según el bando en donde querías ubicarte. Tanto así que en todo ámbito de comunicación los argumentos faltan, lo que se impone son los insultos. Con cada agravio demostramos cuán intolerante somos y los medios extranjeros nos refriegan en la cara el racismo que muchos no superan.
Cuando todos debemos esperar con cierto optimismo -y con los pies sobre la tierra- las decisiones del nuevo gobierno, más bien orquestamos una banda de saboteadores, especuladores, pesimistas y derrotados para exigir señales como la designación de los ministros. Creo que es necesario que lo sepamos en un tiempo razonable, prudente y no caigamos en los intereses de unos pocos.
El éxito del nuevo gobierno dependerá de las decisiones del Ejecutivo, pero también del apoyo de la población y no solamente de quienes votaron por Ollanta porque la campaña ya terminó, sino de todos y todas. Eso no quiere decir que no seamos críticos con cada decisión. Y eso no es una tarea exclusiva de la prensa, los periodistas, sino de la sociedad civil. Si muchos colectivos contribuyeron a que Keiko no sea elegida presidente, el voto prestado se devuelve con una tarea fiscalización, por su puesto con crítica constructiva.
Dejemos también que el actual presidente culmine su mandato hasta el 27 de julio. Hasta esa fecha le pagamos su sueldo. Seguramente quedarán muchas bombas de tiempo, como los conflictos sociales (Puno es solo un ejemplo), por lo que la tarea del presidente electo será ardua y complicada. Veremos cómo hará real cada promesa, como
sábado, 21 de mayo de 2011
Cuántos robos debemos esperar
Viajar en combi te permite conocer los temas de mayor interés de cierto sector de la población, algo así como los Trendig Topics en la conocida red social Twitter. Y no solamente las elecciones preocupan a los piuranos, sino también –y desde hace un buen tiempo- la inseguridad ciudadana.
Las portadas de los diarios locales provocan el inicio de la conversación entre pasajeros. “¡Cuántos asaltos!”, “¡Ya no podemos vivir tranquilos!”, “Piura está cada vez peor”, así se expresan desde una cólera contenida, quizás por una mala experiencia, hasta la resignación. Por su puesto que primero se culpa a los Gobiernos de turno, a la policía e incluso a la mala suerte.
Hubo un comentario que me ha inquietado de sobremanera. “¿De qué sirvió esa marcha contra los asaltos?”, dijo una señora. Y su compañero de viaje agregó con una sonrisa irónica: “Creo que en esta semana han robado más”. Desde luego que estas dos personas no habrían participado en esta actividad, porque como suele ocurrir con muchos piuranos miramos estos temas con total indiferencia.
Y pues estamos de acuerdo en que lo que se hace para contrarrestar la delincuencia es muy pobre, casi nada. No se logra articular una política efectiva para disminuir la incidencia delictiva. Cuándo se busca una explicación se dice que la falta de dinero impide una mayor contratación de policías, serenos, compra de cámaras de vídeo vigilancia, entre otros aspectos.
Los policías deberían cambiar de actitud frente a los denunciantes, porque muchas veces se convierten en cómplices cuando sacan provecho de la desgracia ajena. Si no fuera así, no existirían las propinas o “déjame para la gaseosa”, una mala costumbre que busca agilizar un trámite, pero al final del cabo termina siendo un vil robo. Por esta razón quien sufre una falta o delito menor, prefiere quedarse callado.
La población exige de sus autoridades un mayor compromiso. Está bien que la municipalidad se endeude para mejorar la seguridad y ojala de una vez por todas se compre las cámaras de vídeo, pero luego no nos vuelvan a salir con la misma cantaleta de licitaciones a paso de tortura e inversión al agua. En ese sentido, todos debemos de cambiar si queremos una Piura mejor.
Pero también la participación de la ciudadanía, de los vecinos, es clave para recuperar la tranquilidad en las calles. He allí el éxito de estas marchas multitudinarias que logran concienciar sobre el rol que nos toca. Con miedo y sin organización no podemos enfrentar este flagelo desde nuestro barrio. Ahora es tiempo de unir todos estos esfuerzos, desde el Gobierno y la sociedad civil, para lograr la ansiada paz.